Tradicionalmente, modelos dentales, fotografías faciales e intraorales y radiografías en dos dimensiones son utilizados para el diagnóstico de ortodoncia, así como su planeación. Para la contribución 

Para estimar la contribución y la importancia de diferentes registros diagnósticos para hacer un diagnóstico de ortodoncia y plan de tratamiento. 

Se realizaron búsquedas electronica en PubMed (1948–July 2012), EMBASE Excerpta Medica (1980–July 2012), CINAHL (1982–July 2012), Web of Science (1945–July 2012), Scopus (1996–July 2012), and Cochrane Library (1993–July 2012).  

Además, se realizó una búsqueda manual en listas de referencia de estudios incluidos para identificar estudios elegibles. No hubo restricción por lenguaje. 

La pregunta PICO (paciente, intervención, comparador, desenlace “outcome”) formulada para este estudio es el siguiente: para pacientes que necesitan un tratamiento de ortodoncia (P), se usará el registro X (I) comparado con el registro Y (C) ¿Cambiar el plan de tratamiento? (O). Solo fueron incluidas publicaciones primarias.  

Dos observadores llevaron a cabo una extracción independiente de datos y una asesoría de calidad. 

De las 1041 publicaciones capturadas, 17 cumplieron con los criterios de inclusión. De estos, solo 4 estudios eran de alta calidad. Por el limitado número de estudios de alta calidad y las diferencias entre los diseños de estudio, las características de pacientes y la referencia estándar. 

Los cefalogramas no son necesitados de forma rutinaria para la planeación de tratamiento de maloclusión Clase II, los modelos digitales han remplazado moldes sintéticos y las tomografías computarizadas de rayo cónico son indicadas para caninos impactados. De acuerdo a los hallazgos, la mínima cantidad de registros para un diagnóstico y tratamiento de ortodoncia no pudo ser definida. 

https://journals.plos.org/plosone/article?id=10.1371/journal.pone.0074186